Asociación ICEA, con el patrocinio de Deloitte, presentó durante la mañana del 14 de julio el III Termómetro de la ciberseguridad en el sector asegurador español, un estudio que permite medir y comparar, tanto la situación en la que se encuentra el sector asegurador en protección de sus sistemas de información y riesgos a los que está expuesto, como a la función de tomador de estos productos.
En la III edición del Termómetro de la ciberseguridad en el sector asegurador español, realizada por ICEA en colaboración con Deloitte, contamos con la participación de 56 entidades o grupos de entidades que representan una cuota de mercado de más de un 82% del volumen de primas del sector asegurador. En esta ocasión, se continuó el análisis llevado a cabo en termómetros anteriores y se abordó, con especial interés, el actual panorama geopolítico y sus posibles efectos en el ciberespacio.
El acto comenzó con la presentación de las principales conclusiones del estudio por Laura Ayala (Técnico del Área de Investigación, ICEA), la cual declaró: “El 87,8% de las entidades tienen un plan estratégico de ciberseguridad” y “El 46,7% de las entidades ha confesado que ha sufrido algún tipo de ataque de ciberseguridad. Entre ellos están los ataques de denegación del servicio, los virus y vulneración del sitio web”.
La presentación continuó con la intervención de Félix De Andrés (Manager, Risk Advisory-Cyber, Deloitte) quien expuso el escenario de concienciación sobre la ciberseguridad que se contempla actualmente en el sector asegurador.
Finalmente, el acto terminó con una mesa redonda moderada por Daniel Hernández Arroyo (Director, Risk Advisory – Cyber, Deloitte) con la participación de Daniel Largacha (Global Soc Director, CCG CERT MAPFRE) y Enrique Rubio-Manzanares (CISO, SegurCaixa Adeslas), quienes trataron diferentes temas como el conflicto entre Rusia y Ucrania y cómo esto está afectando a la ciberseguridad, la presión regulatoria del sector con la ciberseguridad, la desagregación de la cadena de valor del propio seguro y cómo ha evolucionado el nivel de madurez del sector con respecto a los ciberataques.
Ante este panorama, y como también se refleja en el estudio, se hace cada vez más relevante la figura del CISO y de un equipo de ciberseguridad que ofrezca tanto una efectiva protección ante amenazas externas como una adecuada comunicación y formación de sus empleados.
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